El boxeador hispano-cubano Enmanuel Reyes Pla agradeció el recibimiento de este domingo en Madrid tras llegar con una medalla de bronce de los Juegos Olímpicos de París y aunque confesó que peleó en semifinales «para discutir el oro», estaba «contento» por haber logrado el primer metal desde Sydney 2000 para un boxeo español que está trabajando bien y que volverá a ser más protagonista en Los Ángeles 2028.
«Bien, bien. Feliz con todo este recibimiento. Estamos viendo que el boxeo se está levantando en España y que a la gente le está gustando, así que supercontento con eso», señaló Reyes Pla a su llegada a Madrid tras los Juegos Olímpicos de París donde fue bronce en -92 kilos.
En este sentido, confesó que estaba «feliz» por su éxito, pero también «un ‘poquito decepcionado'» porque el combate que había hecho en las semifinales «era para discutir el oro». «Pero bueno, contento porque al final rompimos la sequía», remarcó en relación a que su metal fue el primero del boxeo olímpico español desde Sydney 2000.
«Mi compañero (Ayoub Ghadfa) y yo hemos logrado dos medallas en una misma Olimpiada que no se había logrado nunca y yo creo que estoy supercontento y superfeliz, creo que el boxeo ahora mismo está muy arriba aquí en España», añadió el púgil.
Este cree que todo se debe «simplemente al trabajo de los entrenadores, que está siendo muy bueno». «Estamos trabajando bien, nosotros durísimo, estamos haciendo buena preparación y mentalmente nos preparamos para esta competición. Yo creo que París lo hicieron para nosotros, para lograr esas medallas y lástima que no nos dieron más márgenes para lograr las que teníamos que lograr. Pero bueno, agradecido con Dios y feliz de lograr esto y que todo el pueblo español esté contento con lo que hicimos», puntualizó Reyes Pla.
«Es verdad que en Tokio fue parecido, no tanta repercusión porque no habíamos logrado las medallas, pero ahora aquí sabíamos que iba a ser más grande. Hemos trabajado superduro para lograr esto y yo creo que el pueblo español nos ha respondido de la mejor forma y de la mejor manera», prosiguió.
Además, ve esto como un refuerzo para el siguiente ciclo olímpico. «Yo creo que nos privaron de ese oro que teníamos, ¿no? Pero bueno, ya sabemos que estamos aquí, ya cogimos la medalla y ahora, si Dios quiere, pensando en el futuro, soñamos con Los Ángeles. Yo creo que dos oros y más medallas van a venir», resaltó.
El bronce olímpico también festejó el hecho de haber competido en Roland Garros. «Es verdad que estamos orgullosos porque al final Rafa Nadal tiene una estatua ahí y lo dejamos también alto, como siempre lo había dejado él», admitió. «Ahora vacaciones, como dice mi compañero. Una ‘comidita’ buena, una cosa así y ya después pensar en Los Ángeles, pero poco a poco», sentenció con una sonrisa.