El golfista español Jon Rahm lamentó fallar a su intento de conquistar por cuarta vez el Open de España, aunque se mostró «orgulloso» de sí mismo por la remontada que llegó a forzar al desempate con Ángel Hidalgo, en un desenlace vibrante que «ayuda a que los niños quieran jugar al golf».
«Soy un privilegiado, estar en un ‘playoff’ del Open de España, con la afición apoyando. Merece la pena trabajar e intentar llegar a este punto», dijo ante los medios después de perder ante Hidalgo en el segundo hoyo de desempate en el Club de Campo Villa de Madrid.
El de Barrika confesó que el marbellí le dio más vida de la esperada, sobre todo teniendo dos golpes de ventaja a falta de dos hoyos. Sin embargo, el líder tembló con el ‘putt’ ganador del hoyo 18 y la afición enloqueció con un final de infarto.
«Ángel ha hecho lo que tenía que hacer, no me ha sorprendido cómo ha aguantado. Se ha complicado quizás el día más de lo que debería haber sido, porque Puig y yo no hemos tenido nuestro mejor día, especialmente en los nueve segundos hoyos. Que lo disfrute, porque ganar en casa con este apoyo es para disfrutarlo», dijo.
Además, Rahm confesó lo bonito del día y del desenlace aunque no pudo ganarlo. «Estamos en Madrid, hay dos españoles, habrá gente para uno y para otro. Ha sido muy divertido, él también ha tenido mucho apoyo, que es lo que debe ser. Esto ayuda, tener un final así ayuda a que esos niños quieran intentar jugar al golf y vivir momentos como este», afirmó, antes de valorar su semana.
«Pensando que el martes seguía en el hospital (tras ser padre), en otro país, al otro lado del Atlántico, estoy contento. Es una pena haber perdido en el ‘playoff’, o no haberlo hecho mejor hoy, con lo que podía haber sido, pero al final no puedo decir que haya sido una semana mala. Me he dado la opción de ganar y estoy orgulloso de mí mismo y cómo he terminado», apuntó.
Por otro lado, Rahm no quiso sacar pecho como estandarte del golf español aunque reconoció su papel, al tiempo que reafirmó su fidelidad al Open nacional siempre que le dejen, en referencia al conflicto con el DP World Tour por ser del LIV GOlf. «Vengo por mí, porque quiero y porque quiero ganar. Es bonito pensar que mi presencia ayuda al golf español», afirmó.
«Tengo la suerte de estar en esa posición. Ha habido muchos golfistas antes, en este torneo y en otros. Este impacto que tengo ahora es también por lo que he conseguido fuera de España. Tengo la suerte de tener esa posición, es un honor poder venir, es una semana muy divertida. Ojalá siga haciéndolo así de bien. Siempre que me dejen pretendo venir, si no vengo es porque alguien no quiere que esté aquí», terminó.